HABLANDO DEL ESPACIO.

Como sabéis, una de las dudas y preguntas que estamos abordando este trimestre, tiene que ver con el espacio. Durante estos días, nuestras conversaciones han girado sobre temas diversos, y todos ellos, nos están sirviendo para hablar acerca de lo que conocemos, y también de lo que no conocemos y nos llama la atención. Estamos llenos de preguntas, y unas van dando paso a otras; intentamos aclararnos utilizando los medios que tenemos a nuestro alcance, y buscamos siempre ayuda tanto dentro como fuera del aula. Vosotros y vosotras también sois parte implicada en todo esto.
Hablamos de asteroides y de cómo éstos llegan a la Tierra; esto nos lleva a conversar sobre cosas que chocan y nos preguntamos quién mueve todo esto allá, en el espacio.

Una idea que no deja de rondarnos la cabeza, es la de la gravedad, como algo que no llegamos a entender del todo, pero que creemos que puede ser la causante de muchas de las cosas que ocurren en el espacio. Para intentar aclararnos, cada uno y una, explicamos a nuestra manera, qué entendemos por gravedad.

Maricarmen trae un texto de su casa, donde nos cuenta, que la gravedad está en el centro de la Tierra; pero, ¿dónde está el centro de la Tierra? Usamos la bola del mundo para reconocerlo y nos apoyamos del dibujo de nuestra compañera.

Reconocemos el centro de la Tierra como un lugar que está dentro de la misma; la seño Carmen nos trae una revista donde leemos que la gravedad es una fuerza y que hace que todo lo que sube, al final siempre termina bajando. Lo comprobamos en el patio con pelotas, incluso con un globo, que creíamos que podría flotar. Amalia recuerda que los globos que llenamos con "aire de nuestro cuerpo" no flotan, pero sí los que compramos ya llenos.

Y ahora que sabemos que la Tierra tiene un centro, nos preguntamos qué más tendrá por dentro, pues la bola del mundo de nuestra clase está hueca. Algunos niños y niñas traen información sobre las diferentes capas, y leemos en un libro el nombre de cada una y sus cualidades. Algunas son finas y otras son más gruesas; tenemos algunas dudas sobre la diferencia entre ambas cualidades, así que traemos al aula objetos finos y gruesos. Analizándolos, nos damos cuenta de que los finos se pueden transformar en gruesos si los doblamos, siempre que sean flexibles; y los gruesos se pueden convertir en finos si los aplastamos, siempre que no sean demasiado duros.

Y hablando de cosas flexibles y duras, nos paramos en la pasta, que en los paquetes está dura, pero que cuando la cocinamos, se pone blanda. Javier trae a clase un paquete de macarrones y nos lee los ingredientes: sémola de trigo dura. Hablamos entonces de la hidratación que sufre ésta y de la que debemos tener nosotros y nosotras mismos a través del agua que bebemos y la crema que nos echamos. Tenemos pendiente explorar este proceso de hidratación cocinando los macarrones.

Tenemos la suerte de contar con la visita de 3 madres que acuden al aula para otro asunto y a las que invitamos a quedarse en nuestra asamblea. Ellas nos ayudan a entender esto de la hidratación y a resolver otras dudas, como que el Sol está más caliente que el núcleo de la Tierra y que el Sol es más grande que la Tierra. Y hablando de todo esto, Sara nos comenta que el Sol y la Luna nos persiguen cuando nos movemos; esto crea polémica, pues algunos están de acuerdo con ella y otros no. Intercambian opiniones y explicaciones, y decidimos salir al patio para ver si el Sol (que ese día estaba escondido tras las nubes) nos persigue. Algunos y algunas siguen viendo el movimiento y otros no; este movimiento nos hace cuestionarnos si la Tierra se mueve. Volvemos a tener opiniones dispares; hay quien cree que sí, pero que lo hace muy lentamente. Y hay quien cree que no, porque si no, nos caeríamos.

En este punto nos encontramos, con dudas y preguntas aún sin responder, con opiniones encontradas, con ideas difusas que no sabemos explicar muy bien. Seguiremos avanzando y a lo largo de todo el proceso, nos iremos enriqueciendo, seguro.