miércoles, 27 de abril de 2011

LOS NÚMEROS EN NUESTRA ROPA.

Hoy hemos estado recordando que hace unos días, buscamos números en nuestros zapatos y pudimos comprobar cuáles eran más grandes comparando los zapatos. Gonzalo escribió en nuestro blog y nos advirtió de que en la ropa también tenemos números. Así que hoy, hemos estado mirándonos la ropa para ver si alguno tenía números en la camiseta o el pantalón. Nos ha salido una lista que hemos apuntado en la pizarra; ahora queríamos comprobar qué número era el más grande y cuál el más pequeño. Pepa ha salido a la pizarra y nos ha dicho que el más grande era el que tenía Gonzalo en la camiseta porque tenía 5 cifras; en efecto, así era. Ahora teníamos que ver cuál era el más pequeño. Primero, fuimos tachando los que tenían 4 cifras, y nos quedamos con 4 números que tenían 2 cifras. Dijimos cuál creíamos que era el más pequeño, pero lo único que se nos ocurría para justificar nuestra respuesta, era que "porque tiene 2 cifras". Pero todos tenían 2 cifras; la seño nos explicó que nos fijáramos en la primera cifra de cada número. Fijándonos en esto, descubrimos que el 12 era el número más pequeño.
Pero como siempre estamos maquinando algo, a pesar de haber resuelto este entuerto, tenemos una duda, y es que no sabemos cómo se llama el número más grande que nos ha salido. Tendremos que seguir averiguando, a ver a quién le podemos preguntar. Esto es un no parar.




ENSAYANDO PARA LA FERIA DE LA CIENCIA.

Esta semana hemos comenzado ya a recordar los experimentos que vamos a llevar a la feria de la Ciencia. Ayer tocó recordar el experimento del pañuelo mágico. Cuando hicimos el truco de hacer que el pañuelo volase, todos los niños y niñas recordaban cómo lo conseguíamos: colocando un imán debajo del pañuelo y otro pegado a la varita mágica. Ya sabéis, la fuerza del imán es tal, que traspasa la tela del pañuelo.

FERIA DEL LIBRO.

Como sabéis, esta semana celebramos la feria del libro en nuestro Centro. Se ha organizado en el gimnasio, y allí, podemos encontrar una gran variedad de títulos para todas las edades. Ayer, martes, visitamos la feria y todos nuestros niños y niñas salieron con un cuento bajo el brazo. Estaban muy contentos y deseando que a la hora del cuento, fuese el suyo el elegido. Leímos el elegido por Mercedes, "El soldadito de plomo". La feria estará abierta unos días más, así que desde aquí, os animamos a que inculquemos en nuestros niños y niñas el gusto por la lectura.






LA MARIQUITA JUANITA Y LA CIGARRA LETICIA.

Si os acordáis, hace ya unos días estuvimos haciendo un puzle en el que teníamos que ir colocando las piezas para averiguar qué dibujo conseguíamos. Cuando ya lo tuvimos terminado, aparecía Juanita tapándose los oídos y unas notas musicales que nos anunciaban que alguien estaba cantando. Pues bien, este lunes retomamos la actividad y seguimos pensando qué animal podía estar cantando; volvieron a salir muchos, pero como nos costaba descubrir el animal en cuestión, la seño nos dio pistas. Nos dijo que el animal salía en un cuento que ya conocíamos y en el que también salía una hormiga. Gonzalo recordó rápido que era una cigarra. Ahora que conocíamos ya a los personajes, leímos el cuento. En él, la mariquita es despertada por el canto de la cigarra Leticia, que no lo hacía demasiado bien. Juanita casi se enfada con ella porque no paraba, pero decidió no hacerlo. En su lugar, le pidió que por favor se callase un poco, pero la cigarra no le hizo caso y siguió cantando. Para apreciar la molestia que sentimos cuando alguien está haciendo jaleo, unos niños fuimos cigarras y otros mariquitas. Las cigarras no paraban de cantar, y las mariquitas querían descansar.




Estuvimos pensando de qué manera conseguir que cigarras y mariquitas estuviesen contentas. Daniel dijo que las cigarras podrían cantar más bajito. Lo comprobamos y nos dimos cuenta de que funcionaba. Ahora las cigarras podrían cantar y las mariquitas podrían dormir. ¡Qué buena solución!


martes, 26 de abril de 2011

PREPARAMOS EL TEATRO.

Además de nuestros ensayos, esta semana hemos comenzado también con la preparación de materiales para los diferentes personajes. Primero, vamos a hacer los huevos de las gallinas, así que estos días, M ª Carmen, Mª José y José C. están metidos en faena.


martes, 19 de abril de 2011

ENSAYOS EN EL TEATRO.

El viernes volvimos a visitar el teatro de nuestro pueblo para comenzar con los ensayos de nuestra obra. Ya conocíamos este espacio, ya que allí también actuamos en el Carnaval de nuestro cole. Estos ensayos nos van a ayudar a familiarizarnos con el espacio, conocer el escenario, ubicarnos en él y sentirnos confiados para el día de nuestra actuación. Conocemos ya muy bien el cuento, los papeles ya están repartidos y poco a poco vamos a ir creando entre todos una obra con la que lo más importante, va a ser disfrutar de cada ensayo.



jueves, 14 de abril de 2011

JUANITO EN LA CASA DE MERCEDES.

Ayer leímos el capítulo del cuento de Juanito que Mercedes y su familia crearon durante el fin de semana. En él, Juanito, Mercedes y su papá, se iban en moto al campo y allí se lo pasaban genial. ¡Menuda suerte tiene nuestra mascota!

UNA NANA PARA EL BEBÉ.

Nuestra amiga Alicia no para ni un momento; la semana pasada la dejamos en la cocina de una casa algo extraña con la duquesa, un bebé, un cocinero y un gato. Pues bien, ahí seguía, y comenzó a suceder algo bastante extraño. De repente, el cocinero empezó a lanzar platos, bandejas y vasos a la duquesa y el bebé. Ninguno sabíamos por qué hacía eso, pero intuimos que sería porque estaba enfadado con la duquesa, que algo le habría hecho.

Alicia estaba muy sorprendida, y más sorprendida se quedó aún cuando la duquesa le dejó al bebé en sus brazos porque decía que tenía que ir a jugar al croquet. ¿Croquet? ¿Y eso qué era? Hablamos de que podía ser algo parecido al fútbol, o al tenis, o al baloncesto, pero no lo sabíamos muy bien. Suerte que Mª José nos contó que ella sí que sabía jugar; se necesitaba un palo, una pelota y un uniforme compuesto por una camiseta roja, un pantalón corto y unas zapatillas de correr. Casualmente, era la ropa que llevaba puesta ella, así que Mª José estaba preparada por si surgía un partido de croquet.
Cuando Alicia se vio con el bebé en sus brazos, no sabía qué hacer, y ahí se quedó; en la misma página que estábamos leyendo nos dimos cuenta de que estaba recogida una nana que la duquesa cantaba al bebé. Cuando la leímos, no nos pareció muy oportuna, así que decidimos inventarnos entre todos otra que Alicia pudiese cantar. Aquí os la dejamos, esperamos que os guste:
       BEBÉ, NO TE VOY A PEGAR,
       NI TE VOY A PINCHAR.
       NO LLORES, QUE TE VOY A DAR UN BESO,
       PARA QUE NO TE COMA EL OSO.


lunes, 11 de abril de 2011

UNA SESIÓN DE EXPERIMENTOS MUY ESPECIAL.

Hoy hemos tenido la visita de la seño Patricia y de otra compañera, la seño Celia para hacernos varias propuestas de experimentos. Han acudido a nuestra clase después del recreo, y en asamblea, primero nos han preguntado qué es el arco iris. Sabíamos que sale en el cielo y que tiene colores. Laura nos ha dicho que salía después de llover, cuando salía el sol. Primero, hemos intentado hacer un arco iris en clase, a oscuras, usando un barreño con agua, un espejo y una linterna. No se veía muy bien, así que decidimos salir al patio y usar la luz del sol. Vimos en una cartulina blanca el reflejo de diferentes colores, ¡habíamos conseguido un arco iris!. La seño Patri nos explicó cómo se formaba a partir de la luz del sol.
El segundo experimento consistía en crear espuma usando agua, bicarbonato, jabón y vinagre. Primero, hicimos espuma blanca, y después, con colorante, hicimos espuma naranja. ¡Parecía refresco de naranja!
Y en el último experimento, llenamos un recipiente de lentejas, enterramos varias pelotas de plástico y algunos caramelos. Dejamos una pelota que pesaba más en la superficie, y comenzamos a remover las lentejas. Entonces, la pelota que pesaba, se hundió, y todo lo que habíamos enterrado, salió a la superficie.
Nos ha encantado la sesión que hemos realizado; le damos las gracias a la seño Patri y a la seño Celia. Esperamos que nos hagan más visitas porque todos juntos, podemos conseguir grandes cosas.

COMPARANDO NÚMEROS.

Hoy hemos seguido con nuestro descubrimiento acerca del número que tenemos en la suela del zapato. Hemos vuelto a revisar nuestro calzado, y nos hemos dado cuenta de que algunos no tenían. Hemos apuntado en la pizarra todos los que sí tenían, y hemos hecho una comparación para encontrar el número más grande de todos. Algunos se repetían, y lo hemos comprobado comparando los zapatos; en efecto, los números iguales se correspondían con zapatos igual de grandes. Después, hemos cogido un representante de cada cifra para ver cuál de ellas era la más grande. Francisco ha dicho que el número más grande era el de Pepa porque ella tiene un calcetín muy grande, y Laura ha dicho que dentro del calcetín está su pie, que también es grande. En efecto, el número más grande era el 29, el de Pepa. A continuación, dudamos entre el de María (27) y el de Lucía (26); decidimos comparar los zapatos, y vimos que el de María era un pelín más grande. Colocamos entonces, primero el de María y después, el de Lucía. Y ahora, estábamos entre el de Mª José y el de Amalia; entre ambos, era evidente que el de Mª José era más grande, así que ya teníamos hecho nuestro ranking particular. El número más grande es el mío (40), después el 29, el 27, el 26, el 25 y el 24. Hemos estado charlando de que Gonzalo nos avisó por el blog de que en la ropa también tenemos números, así que en breve comenzaremos a comparar números que tenemos en nuestra ropa. Gracias por colaborar en todo este proceso.





domingo, 10 de abril de 2011

LAS MATEMÁTICAS PARA RESOLVER PROBLEMAS.

Cuando hicimos la visita al restaurante, aprendimos muchas cosas, volvimos al cole con muchas de nuestras dudas ya resueltas. Pero ojeando las fotos y revisando su contenido, nos dimos cuenta de que son muchas las veces que en la cocina de un restaurante se utilizan las matemáticas para resolver situaciones que van surgiendo. Pues bien, ya habíamos hecho de cocineros en nuestro taller de cocina, y ahora, íbamos a volver a serlo para intentar solucionar 3 problemas matemáticos que todo buen cocinero debe saber resolver. Para hacerlo, pedimos ayuda a 3 madres de otras clases que vinieron el viernes a nuestra clase; cada una de ellas, se puso en una mesa y planteó un problema. Los niños formaron tres grupos y debían rotar para pasar por las 3 mesas y así, resolver los 3 problemas. Uno, estaba relacionado con el pan, y es que el jefe de cocina nos enseñó a colocar el pan en la bandeja y meterlo en el horno. En cada bandeja cabían 6 panes, pero en nuestra clase para poder comer todos, necesitábamos 24. La cuestión entonces era averiguar cuántas bandejas necesitaríamos para hacer pan para todos. Los niños buscaron ayuda en la plastilina, y para resolver el problema, hicieron panes moldeándola.
El segundo problema estaba relacionado con la tortilla que también nos hicieron. Era una tortilla pequeña, pero nosotros íbamos a imaginar una más grande con la que pudieran comer todos los niños de cada grupo. Tenían que averiguar en cuántos trozos debían cortar la tortilla y lo harían con una tortilla hecha de cartulina que irían cortando para intentar que todos los trozos saliesen iguales. 
Y el tercer problema hacía referencia al café que nos enseñó a hacer el papá de Gabriel. Usó un cacito para hacerle un café a un cliente, así que les presentamos a los niños un paquete de café entero y un cacito para que calculasen cuántos cafés podrían salir de un paquete. Primero, lo debían hacer estimando, y después lo comprobarían con café real. 
Esta vez contamos con la ayuda de Fini (madre de Hugo), Mª del Mar (madre de Valentina) y Miriam (madre de Carmelo). Somos una comunidad, y por eso, nuestras aulas están abiertas no sólo a nuestras familias, sino también a las familias de nuestros compañeros mayores. Les agradecemos a las 3 su colaboración porque gracias a ellas, la experiencia mereció la pena.


EL OLFATO DE ALICIA.

En la lectura de esta semana de nuestro cuento preferido, Alicia llegaba a una casa de la que se escuchaba un gran jaleo. Antes de seguir leyendo, hemos estado pensando qué podría ser tanto ruido; Daniel me ha dicho que habría un monstruo que estaría partiendo los “sofares” porque estaría enfadado, Javier que habría un dragón enfadad, Pepa que un dinosaurio que luchaba con el monstruo, Laura que un león que también luchaba, y Moisés que un tigre. Hemos seguido leyendo y nuestra amiga, se atrevió a abrir la puerta. Allí, se encontró una cocina en la que estaba un cocinero, la duquesa, un bebé y un gato. Alicia comenzó a estornudar por culpa de la pimienta que el cocinero le estaba poniendo a la sopa porque estuvimos hablando de que la pimienta a veces se cuela en nuestra nariz y nos hace estornudar. Aquel gato que estaba en la cocina no paraba de reír, y nos preguntamos que por qué reía tanto. Daniel me dijo que porque se alegraba de ver a Alicia, Pepa que porque a lo mejor el gato era su gata Dina, Laura que porque a lo mejor era la casa de la abuela de Alicia y el gato la conocía, Gonzalo que porque se ríe del ruido que hacía el bebé (no lloraba, sino que emitía un ruído insoportable), Javier que porque el gato es feliz, y Pepa de nuevo, porque sería su cumpleaños. Terminada la lectura, nos centramos en el olfato que Alicia tenía y que le había hecho estornudar al apreciar con su nariz la pimienta. A raíz de esto, hicimos un taller de olfato en el que un compañero daba a otro algo para oler, y éste, sin mirar, tenía que adivinar de qué se trataba. Algunas cosas fueron más fáciles de adivinar que otras, y es que ¿a quién se le iba a ocurrir que la seño trajese a clase pescado, colonia y hasta pasta de dientes?






viernes, 8 de abril de 2011

VAMOS DESCUBRIENDO LOS NÚMEROS.

En nuestro afán por aprender, ahora estamos investigando sobre los números, esos que están presentes en nuestro día a día; resulta que el día que Patricia trajo los billetes de pesos, nos preguntamos qué billete era más grande, si el de 20 o el de 50. Había opiniones para todo, así que al día siguiente, intentamos aclarar nuestra duda usando un metro que la seño tiene en clase.


Tuvimos una conversación muy rica acerca de los números, y entonces comenzó nuestro acercamiento a ellos. Ayer, decidimos buscar números en nosotros mismos, y descubrimos que en nuestro zapato, cada uno tenía un número. Bueno, algunos no tenían número y decían que seguro que otro día con otros zapatos sí que tendrían. Estuvimos comparando algunos de ellos, pero esta vez no teníamos metro. ¿Qué podríamos hacer? Laura propuso que el zapato más grande seguro que también era el número más grande. ¡Eureka! Con esta propuesta, comparamos algunos zapatos más, y en efecto, el número más grande era el del zapato también más grande. 



Estamos descubriendo los números, seguro que vosotros desde casa también podéis ayudarnos a apreciar todos los números que nos rodean.