Hoy hemos disfrutado de una ayuda muy especial para seguir avanzando en nuestro conocimiento acerca de los imanes. José Manuel, el papá de Manuel ( un alumno de 1º de E.P.) y su mamá, se brindaron para realizar en clase una experiencia con imanes, tan familiares en nuestra clase durante este año. Pues bien, las dos clases de 3 años nos fuimos a la clase del maestro David y allí ya nos esperaban los padres de Manuel. Para que viesen que nosotros sabemos mucho de imanes, estuvimos explicándoles todo lo que ya sabemos. Después, José Manuel comenzó una sesión muy interesante, claro, es profesor de Universidad, un cole para niños muy muy grandes. Nos propuso hacer una brújula y para ello, utilizamos un imán una cuerda a la que atamos un imán. Al coger la cuerda por el otro extremo, el imán comienza a dar vueltas, hasta que se para, señalando uno de sus polos al Norte y otro al Sur.
A continuación, nos presentó una lámina de plástico doble que en su interior tenía limaduras de hierro. Nosotros ya sabemos que el hierro es un metal que sí que se pega a los imanes. Lo que hicimos fue colocar imanes de diferentes formas sobre la lámina para ver cómo las limaduras de hierro empezaban a moverse, colocándose todas en los extremos de cada polo. ¡Parecía como si estuviésemos dibujando! Porque dependiendo del imán, las limaduras iban haciendo diferentes formas.
Nos enseñó también un tubo de metal algo misterioso. Cuando lo colocábamos verticalmente y pasábamos por su interior cualquier objeto, éste caía al suelo rápidamente; pero sin embargo, cuando pasábamos un imán de neodimio ( los que sabemos que son más potentes), éste tardaba más tiempo en traspasar el tubo, ¡increíble!
Ya por último, José Manuel nos explicó que el imán más potente de todos, el más grande, es la Tierra, con su polo Norte y su polo Sur.
Ha sido una sesión muy interesante y fructífera. Agradecemos desde aquí la colaboración de los padres de Manuel. ¡Ha sido un placer y todo un lujo!
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