POR FIN, LLEGA EL PRIMER DÍA.

Hoy por fín, nos hemos vuelto a reunir todo el grupo de los conejitos y las conejitas. Era un día de nervios, de emoción contenida por esta nueva etapa que acaba de comenzar. Con un horario un tanto extraño, nuestros niños y niñas entraban decididos y muy dispuestos por la puerta principal de nuestro colegio. Ya sabían dónde venían y con quién se encontrarían, así que les ha sido fácil. Como si el tiempo no hubiese pasado, han ido buscándose en la puerta para entrar de la mano, ilusionados por encontrarse de nuevo. Paseando por ese pasillo que tan bien conocen, han ido frenando sus pasos al ver cómo en unos percheros, hasta ahora desconocidos, estaban sus fotos. Esa ha sido la pista que necesitaban para descubrir nuestra nueva clase; hemos tenido poquito tiempo, pero ha sido suficiente para contarnos cómo han sido nuestras vacaciones, qué hemos hecho, dónde hemos estado y lo mucho que nos hemos echado de menos. José C. contaba que casi se ahoga en la playa, Moisés que capturó a un tiburón, Amalia que se bañó en una playa llena de pececitos de colores, Javier ha estado dos veces en Torremolinos, y Raúl fue a la misma playa que Pepa pero no la vio porque era una playa muy grande. Hemos saludado a Juanito y a Juanita, tanto tiempo solos, pobrecitos.
En fin, un día especial que ha supuesto el comienzo de un nuevo curso que espero sea tan increíblemente bueno como el anterior. ¡Comenzamos!