Es increíble cuántas cosas pueden suceder en un aula si las puertas están abiertas y los niños y niñas están motivados a traer cosas. Hoy María ha querido compartir con nosotros algo que para ella era casi casi un tesoro, un libro de cuando su mamá era pequeña. Lo ha enseñado en la asamblea con cuidado, con mimo, avisando que su mamá le había dicho que teníamos que cuidarlo. Hemos estado viendo el nombre de su madre escrito en la primera página, el nombre del autor del libro, su foto y su biografía; y abriendo por algunas de sus páginas, hemos visto que el libro incluye 12 cuentos. Hemos leído sus títulos y nos hemos puesto a imaginar lo que podrían contar. Hoy María ha elegido el cuento número 10, "Hermano caracola"; lo hemos estado leyendo, compartiendo la historia de un niño que soñaba con ser pastor, cuidar a las cabras y disfrutar del campo. Al final de la historia, la mayoría querían terminar igual que aquel niño. Hemos hablado de la importancia de primero estudiar, formarnos y aprender muchas cosas, para después poder elegir lo que más nos guste cuando seamos un poco más grandes.
El libro de María se ha quedado en clase y hemos decidido, que como es un libro con muchas letras, lo leeremos en asamblea, con ayuda de la seño.
Y siguiendo con los libros especiales, Laura ha traído ha clase un nuevo libro de princesas, uno de los personajes que pueden vivir en un castillo. Hemos estado viendo que se trataba de princesas de cuento que la mayoría ya conocíamos. Y es que estamos viendo que los castillos están presentes no sólo en la historia de la Edad Media, sino también en infinidad de cuentos. Un nuevo libro para nuestra biblioteca de aula.
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